Una mujer endemoniada - Jim Thompson

Hace un tiempo Jim Thompson era considerado mayormente por el público en general, el no especializado en novela negra, lo que en música se suele denominar un “one hit wonder”, es decir, aquel artista reconocido por una sola obra, en este caso en relación a la soberbia “1.280 almas”. Actualmente esta situación ha cambiado principalmente por la combinación de la fama adquirida por dicho género en general y más en concreto por la recuperación por parte de algunas editoriales de obras menos conocidas de autores clásicos. LEER MÁS


Sea por lo que sea se ha logrado que el escritor norteamericano haya salido de los ámbitos más reducidos o especializados, y su figura, con sus múltiples cualidades, no solo se circunscriba a las novelas policíacas sino que amplíe su radio de acción de manera considerable.

“Una mujer endemoniada”, escrita en 1954, es otra de esas novelas que deben servir para ensalzar su inigualable y particular forma de narrar, con unas características muy constantes y patentes a lo largo de su obra (este caso no es una excepción) que le hacen poseedor de un “mundo” totalmente reconocible.

Eso quiere decir que estamos ante un libro narrado en primera persona, esa forma tan singular de utilizarla en la que se busca, por parte del personaje principal, una cierta complicidad con el lector. La ambientación es también marca de la casa, la Norteamérica más profunda donde sus habitantes rezuman una frustración personal, mezcla de rutina y de sueños rotos, que se retroalimenta con una sociedad que imposibilita casi por completo la redención, de hecho es un término que parece desconocerse.

En este caso concreto nos topamos con Frank “Dolly” Dillon, un hombre que tras pasar por varios empleos, a cada cual más mísero, acaba en un empresa de venta de artículos variados en la que se encarga de cobrar los pagos de morosos. En esa sórdida vida (con ingredientes habituales como matrimonios deprimentes, alcohol y violencia) se cruza una joven aparentemente inocente maltratada por la mujer mayor con la que vive y con la que empieza una relación peculiar.

Unos trazos arquetípicos en Jim Thompson a los que hay sumar una profunda falta de moral del protagonista (a la altura de todos los que le rodean), a pesar de ser reconocido por los demás como un “buen hombre” y que incluso el propio lector en un principio puede albergar sus dudas. Como siempre, dicho personaje, es presentado en un momento concreto y no se explicita de una forma demasiado obvia cuál es su recorrido o bagaje personal. A pesar de eso, ciertos detalles, regresiones biográficas o pensamientos, nos dan los suficientes indicios para hacernos una composición de su contexto. Elemento clave para la narración, tal y como quedó demostrada en la fallida versión cinematográfica realizada por Michael Winterbottom de “El asesino dentro de mí”, titulada “El demonio bajo la piel”, precisamente al prescindir de él.

A partir de un momento determinado de la novela, y como es habitual, la espiral en la que se verá inmerso Frank no tendrá vuelta atrás posible y le hará vivir una caída en picado donde nada es lo que parece y se pondrá en evidencia su errática “suerte” y la no menos evidente “condición humana” de todos los que rondan por esta historia.

Jim Thompson vuelve a lograr con “Una mujer endemoniada” y su estilo sobrio y crudo, hacer otro retrato no ya de un personaje amoral, desquiciado y sin ningún futuro en su existencia, sino una visión mucho más genérica pero igual de desoladora donde la maldad y la codicia se impone en cualquier esquina y siembra sus semillas extiendo su nefasta condición.

Kepa Arbizu

FICHA DEL LIBRO

Título: Una mujer endemoniada | Autor: Jim Thompson | Editorial: RBA |Páginas 144 | Precio 16€ | Reseñado por : Kepa Arbizu

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