Stoner - John Williams

En España John Williams (Texas, 1922-1994) era un lamentable desconocido antes de que la editorial Baile del Sol se decidiera a difundir esta espléndida novela suya, publicada por primera vez en 1965 y justificadamente venerada por la crítica americana. Resuenan en ella las inquietudes de algunos de los escritores norteamericanos que integraron la llamada generación perdida, término éste acuñado al azar por Gertrude Stein (You are all a Lost Generation, le espetó al grupo en cierta reunión) e inmortalizado por Hemingway. Comparte Williams con dicha generación la densa melancolía que atenazó a la literatura norteamericana a raíz de la Primera Guerra, de la crisis económica del 29 y de la Ley Seca. LEER MÁS

El protagonista, dotado de considerable carga biográfica, es William Stoner, un joven taciturno criado en una granja de Missouri que marcha a la Universidad para estudiar Agricultura y poder así introducir mejoras en la granja familiar. Pero el destino, valiéndose de un singular profesor de literatura inglesa y de la emoción de un soneto de Shakespeare, le hará colgar el azadón en favor de la tiza y la pizarra. Resulta imposible describir mejor y con más austeridad el impacto del epifánico deslumbramiento que marcará la vida de Stoner, y que le llevará a renunciar al legado familiar en la granja, arriesgándose a ingresar en un “mundo en el que siempre estarás a punto de lograr el éxito pero serás destruido por tu fracaso” (p.32). Tampoco se puede describir mejor la conmovedora dignidad de unos padres campesinos que asisten a la deserción de su hijo con el estoicismo del labriego que se aviene a las veleidades del clima. La escena de la graduación es sencillamente perfecta: el lector palpa a esos padres apocados en la ceremonia de graduación de William, tan distantes ya de su hijo como éste de la tierra que contribuyó a labrar con sus manos. En España y más recientemente tal vez hayan sido Torrente Ballester y Antonio Muñoz Molina quienes mejor hayan sabido retratar la dignidad del labriego de antaño, educado en el saber de la intemperie.
Conecta la novela en este sentido con Las uvas de la ira en la que tan magistralmente plasmó Steibeck los efectos de la crisis del campo estadounidense en los campesinos. De alguna forma misteriosa, inadvertida, y pese al creciente ascenso intelectual de Stoner, su pasado labriego ha cincelado su carácter hasta convertido en una persona íntegra, en respetado maestro cuyo adaptabilidad –que no pusilánimidad- le capacita para encarar sin aspavientos emocionales la mediocridad de una existencia opaca en cada uno de sus sencillos frentes: matrimonio insípido, hija desapegada, relativo aislamiento social, rencores en el competitivo coso universitario, carrera profesional de corto vuelo, etc.
Lo más encomiable de la novela de Williams es su sencillez extraordinaria y engañosa, el alcance de una historia mínima contada con frugalidad, la de un hombre virtuoso (ahí es nada en estos tiempos) que sedimenta en el lector por su implícita clase magistral de sabiduría humana rematada en un final bellísimo. Un milagro que muchos escritores ambicionan y que pocos catan. Habrá que aguardar a que la editorial se decida a publicar más de este autor poco prolífico (ya saben, lo bueno si breve…).

LALE GONZÁLEZ-COTTA

FICHA DEL LIBRO

Título: Stoner | Autor: John Williams | Editorial: Baile del Sol | Páginas 246 | Precio 15€ |

Comentarios

roro ha dicho que…
Hacía tiempo no me emocionaba tanto con una novela. Una historia íntima de vida más íntima magistralmente narrada, bella e inteligente prosa a la vez (gracias!)... no solo engancha mientras lees sus demasiado cortas páginas... Stoner es de esos personajes que aman tanto que se quedan... como el tío abuelo del que no sabías nada hasta que descubriste su diario y sus cartas... ahora a buscar algún libro de poemas de John Williams
miguelroro@gmail.com