El fin del mundo y un despiadado país de las maravillas - Haruki Murakami

Para leer un libro de Murakami hay que olvidarse de los conceptos de realidad que conocemos y adentrarnos en otras alternativas que van desde opciones con algunos rasgos ajenos a la vida común hasta fantásticas historias intemporales en lugares inconcretos. Precisamente las dos narraciones entreveradas de este libro se encuentran al otro lado de la realidad, El fin del mundo en el punto más alejado y Un despiadado país de las maravillas justo a un paso de nosotros. (leer más)

El libro que nos ocupa fue escrito en 1985 y ocupa el lugar inmediatamente anterior al afamado Tokio Blues. Murakami va madurando muchos de los rasgos que sus mejores textos contendrán en el futuro y se percibe su amor e interés por escribir sin presiones comerciales ni conceptuales. Aún hoy día, cuarto de siglo después, sigue siendo un volumen sorprendente, tierno y fantástico en sus diferentes acepciones.

El informático sin nombre cuyo cerebro ha sido programado para encriptar información en una sociedad enfrentada por su controlar el flujo de datos, tiene su alter ego en la ciudad amurallada de El fin del mundo, donde un joven que no sabe que hace allí comienza a reconocer su nueva vida. Ambos tendrán que enfrentarse a un trabajo especial que incluye cráneos de animales capaces de contener información ajena y desconocida para ellos. Poco a poco iremos conociendo los dos lados del espejo y trazando líneas cruzadas que les conectan, entre ellos las bibliotecarias, el profesor, la chica gorda vestida de rosa, el guardián y las bestias.

Posiblemente el lector novel de Murakami se quede estupefacto tras cien páginas de lectura; incluso el habitual torcerá el gesto en más de una ocasión. Sin embargo, poco a poco nos cautiva el deseo de conocer más de los dos mundos sin sentido y a medio libro ya estamos deseando retomar ávidamente su lectura. A partir de ahí la goleada cae del lado del autor, ya que ilumina los relatos con una ternura especial y diferente, especialmente ajena al mundo occidental, la cual crece hasta el final en el que ambas líneas confluyen en un mismo punto, tiempo y persona.

No es el mejor libro de Murakami, pero tiene destellos de verdadero talento. Su escritura mejoró a partir de Tokio Blues, pero también incluyó algunos vicios ausentes en este libro tales como el eclecticismo dentro de la línea narrativa y el exagerado peso de las conversaciones que tapizan todo el texto.

Brillante, fantástico, muy cercano al mundo del cómic, también anejo al cuentismo, y con dosis Kafka y Borges, sin duda un buen libro de este que es nuestro caballero de la Orden de las Artes y las Letras español.

Pepe Rodríguez

RESEÑA DE LA EDITORIAL

Dos historias paralelas se desarrollan en escenarios de nombre evocador: una transcurre en el llamado «fin del mundo», una misteriosa ciudad amurallada; la otra, en un Tokio de un futuro quizá no muy lejano, un frío y despiadado país de las maravillas. En la primera, el narrador y protagonista, anónimo, se ve privado de su sombra, poco a poco también de sus recuerdos, e impelido a leer sueños entre unos habitantes de extrañas carencias anímicas y unicornios cuyo pelaje se torna dorado en invierno. En la segunda historia, el protagonista es un informático de gustos refinados que trabaja en una turbia institución gubernamental, enfrentada a otra organización no menos siniestra en una guerra por el control de la información; sus servicios son requeridos por un inquietante científico que juguetea con la manipulación de la conciencia y de la mente y vive aislado en la red de alcantarillado, una red poblada por los tinieblos, tenebrosas criaturas carnívoras.


Ficha del Libro

Título: El fin del mundo y un despiadado país de las maravillas | Autor: Haruki Murakami | Traducción de Lourdes Porta Fuentes | Editorial: Tusquets| Precio: 21 € | Páginas: 488 |

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Si este hubiese sido el primer libro de Murakami que leía no creo que me hubiesen entrado muchas ganas de repetir con otro.
Menos mal que antes me encontre Tokio Blues, Kafka en la orilla, Sauce ciego-mujer dormida, Crónica del pájaro que da cuerda al mundo y al Sur de la frontera al oeste del sol.
Es el único libro de Murakami que no recomendaría a mis amigos.
Ya está, me he desahogado de la lectura de estos tres últimos días.
MARCE.